lunes, 27 de junio de 2011

Ultra Trail Sobrarbe 2011. De Ainsa a Plan apurando.

Escribo esto el Lunes pues es la primera vez que tendo acceso a un ordenador  y, espero que a Internet desde que volví de Aínsa. En compensación estoy en la costa disfrutando de una maravillosa vista del mar al amanecer … y en compañía de seres queridos .
Esto comienza el viernes pasado. Salgo rumbo a Aínsa con tiempo de recoger el dorsal con tranquilidad y acudir a visitar a Montse y Quique  en Boltaña.  Casualmente Quique, que trabaja conduciendo autobuses, está encargado de llevar a los corredores desde Plan Aínsa una vez acabada la cena … pero eso es adelantar acontecimientos.
Después de una agradable velada con esos amigos me voy a la cama pronto que el sábado promete.
A las cinco arriba y enseguida rumbo a Aínsa. La carrera esa montada para aprovechar al máximo la luz del día por eso la salida es tan temprano.
Estamos casi los 300, en realidad tomamos la salida 280 según me enteraría después, tomando algo de desayuno en el patio del castillo y dejando las mochilas para Plan.

 También se pueden dejar los bastones para que te los lleven a Lafortunada que es donde empiezan la primera de las dos cuestas importantes.

Yo decido llevar los bastones desde el principio que no me quiero acostumbrar a demasiadas comodidades…
Ya en línea de meta nos dan unos consejos y guardamos un minuto de silencio en memoria de Irene Edo.

Empieza a ser habitual, por desgracia, este tipo de recordatorio de nuestra propia fragilidad antes de empezar cada carrera.
La salida, a las 6:15, es casi neutralizada hasta coger las marcas de la GR a la salida de Aínsa por lo que seguimos a los atletas del CAS que después de un divertido despiste nos dejan en las primeras marcas rojas y blancas de esta Gran Ruta.
Una de las características de esta carrera es que, salvo los 3 últimos kilómetros, el resto del trazado esta marcado todo el año al coincidir su recorrido con la GR 19. Aprovechan la carrera para remarcar algunas partes y limpiarla de maleza y de esa forma se mantiene la senda en buenas condiciones para el resto de excursionistas y para nosotros.
En la salida coincido con Ramón con el que compartí el final de la Jorgeada y que está en bastante mejor forma como me demostrará más adelante.  
Los primeros 24 Kilómetros van siguiendo la vertiente derecha del rio Cinca. Son bastante llanos y nos permite hablar bastante y ponernos al día de entre los corredores que empezamos a ser habituales.
Esta un nutrido grupo de Barbastro de los que conozco de la UTGS a Javier Mur, Miguel Barfaluy y el Sr Ornitorrinco.
En los puntos estratégicos me encuentro a Monrasin haciendo fotos. Me reconoce y me dice “eres incansable ” … y yo me voy pensando que a ver si esta vez hago una mejor posición que la última vez que me vio …
Pasamos un par de avituallamientos y en Lafortunada, donde está el tercero y los bastones, empieza la primera cuesta.
Son 600 metros de desnivel hasta Tella que se hacen bastante bien por el bosque a la sombra.
Me veo mejor en las cuestas que en Canfranc  aunque sigo con un ritmo lento subiendo.
Pasado Tella empieza la segunda parte de la primera cuesta.
En esta parte me encuentro a un grupo de corredores que mantienen una animada conversación aliñada con chistes, no muy buenos para ser sinceros,  sin dejar de subir a un buen ritmo así que me uno a ellos. Entre ellos esta Lucas de 7:45 a quien conocí en Alquezar donde lo pasó bastante mal y Jesús de Anuesport. 
Quien haya corrido las maratones de Zaragoza recordará a Jesús pues es la tradicional liebre de las 4 horas y culpable, con su buen humor y su altavoz, de que mucha gente finalice esa carrera.  
Es un buen grupo, animado y veloz, pero la cuesta se hace más pronunciada y no puedo seguirlos así que me descuelgo con bastante pena…
Esta parte son 840 metros de desnivel. La primera parte por bosque pero en seguida salimos a terreno despejado. El paisaje es espectacular y cuesta imaginar por donde, entre la inmensidad del paisaje, vamos a encontrar el Portillo de Tella que es la cima de esta cuesta.
Esta parte me cuesta más y el resto de los corredores me adelantan sin dificultad pero yo he venido, y más después de Canfranc, mentalizado a acabar de los últimos si no el último.
Cuando, al fin, me doy cuenta de donde está el paso y de lo mucho que me falta me adelanta Ramón.
Habíamos salido a la vez desde Aínsa y después de ir unos kilómetros juntos yo me adelanto.
Ramón es de esa clase de corredores que empiezan como una hormiga y acaban en gacela y ahora está en la mitad de la transformación (o sea en cabra pirenaica, !muy apropiado¡) .
Me cuenta que tenemos que darnos prisa que falta media hora para que cierren el control de Bielsa.
Yo me quedo helado al oírlo. Sabía que iba lento pero no que iba tan mal. Ni en Canfranc ni aquí he llevado reloj (solo en el móvil para emergencias) por lo que me tenía que fiar de lo que me contaban el resto de corredores. Lo hacía fundamentalmente para no agobiarme con los tiempos lo que acaba convirtiéndose en un error. Lo que tengo que aprender es a, conociendo el tiempo de actividad que llevo, darla la importancia que tiene para conocer lo que puedes hacer en cada circunstancia tanto en distancia como en desnivel a superar.
Pero bueno el caso es que veo muy lejos el Portillo de Tella … no puedo mantener el ritmo de Ramón y tengo claro que no voy a llegar al control de Bielsa a tiempo de poder seguir la Ultra.
Son los momentos en que piensas que es una locura en lo que te has metido … en que si esto es duro ya verás en Aosta … en que si ya te lo decía yo …
Consigo centrarme y, sin dejar de de caminar, decido que seguiré hasta Plan, aún fuera de carrera, si me aseguran que puedo encontrar agua por el camino. La intención era entrenar desnivel y si me quedo en Bielsa pierdo la oportunidad de superar otros 1100 metros.
 China chano llego al collado. Aquí todo cambia.
En primer lugar  están el grupo de Jesús con la misma animada conversación y optimismo desbordante. Luego el punto de avituallamiento con la generosidad de los voluntarios que se preocupan de que te sientas a gusto y te hacen fotos sin problemas. Pregunto si podré seguir desde Bielsa a pesar de ir tan tarde y me dicen que voy justo pero en tiempo…
Resulta que a Ramón le habían informado mal justo con una hora de diferencia y eso es justo el tiempo que nos hacía falta para ir dentro de tiempo.
Bastante más animado me lanzo cuesta abajo, que fácil se hace, con Jesús. Al llegar al bosque dejamos de ver señales.
Bueno, la aventura es así y este es otro de los alicientes de este tipo de actividades … con la ayuda de Jesús encontramos otra vez las marcas al tiempo que damos gritos para orientar al resto de los corredores. El espíritu de Jesús siempre tratando de ayudar al resto de corredores a finalizar la carrera me gusta pues es algo que comparto y que es una de las características que me encantan de esta actividad.
Jesús me cuenta que duda entre seguir hasta Plan o quedarse en Bielsa pues tiene que marcar la Extrema Desértica y no quiere agotarse demasiado además de que así puede tomarse  una merecida cervecita en alguna de las terrazas de la plaza.
En animada conversación llegamos a Bielsa. Aquí acaba la Maratón el tope de paso para la Ultra son las dos y para la Maratón las 3.  Son las 13:45 o sea me ha sobrado media hora para el tope de control.
Buen avituallamiento, naranjas frescas, plátanos y frutos secos … Veo a Jesús tomándose su merecida cerveza y me encuentro con Ramón. Ha llegado bastante antes y después de comentar el despiste con la hora salimos juntos a encarar el siguiente tramo.
Esta parte esta cruzada por bastantes riachuelos. Al principio intentamos cruzarlos sin mojarnos pero al final meto los pies directamente en el cauce y aprovecho para beber usando la gorra como vaso. Seguro que en todos los manuales desaconsejan mojarse los pies y las zapatillas en mitad de este tipo de actividad pero yo ya lo probé en el Ibón de Tortiellas hace dos semanas. Te refrescas los pies y ni los pies ni las zapatillas parecen sufrir más de lo habitual.
Ya desde el bosque un corredor del CAS nos indica por donde está el paso y no sé si será por esto el caso es que esta cuesta se me hace bastante llevadera. Aún así me distancio del grupo que va liderado por Ramón y empieza la habitual, para mí, sucesión de corredores que me adelantan. Así veo que Jesús ha decidido seguir en un nutrido grupo en el que está también Lucas. Yo sigo a mi ritmo, lento pero mejor que hace 20 días, entre el bosque y refrescándome en cada riachuelo por el que paso.
Salimos del bosque y ya vemos las banderolas que marcan el paso de Cruz de Guardia al alcance de la mano. Adelanto a Lucas que se encuentra algo flojo. Me acuerdo de que lo vi más o menos así el Octubre pasado y espero que esta vez le vaya mejor.
El dice que no se encuentro muy bien pero que sigue.        
Unos cien metros antes del collado y a la sombra del único árbol que por allí queda un par de voluntarios han montado un punto de avituallamiento extra porteando a hombros el agua y el resto de vituallas que se agradecen especialmente.
Con esa ayuda llego al collado. Allí esta Jesús un tanto preocupado por Lucas así que avisamos a los del punto de avituallamiento que se dedican a seguir su paso con los prismáticos para comprobar que, aunque lento, sigue subiendo.
Son las 4:30 y el cierre de meta es a las 7. Pero eso me da igual ya tengo claro que acabo la ruta y el tiempo me da lo mismo. Así que disfruto del paisaje. Este es el punto más alto de la ruta. Un buen sitio para dedicar unos momentos al recuerdo de quien, sin duda, disfrutaría de estas vistas.
En este punto de avituallamiento  y como novedad tenemos unas deliciosas galletas. Yo, que llevo todo el día con naranjas y trozos de plátanos, no me puedo resistir y me como 4 seguidas … antes de que me llamen el monstruo de las galletas me despido y emprendo la bajada.
 Son 15 kilómetros con una pequeña subida pasado Serveto.  En este pueblo está el penúltimo punto de avituallamiento al que llego bastante bien y muy animado. Enseguida llega otro corredor al que he adelantado un par de kilómetros. Se tumba en el suelo y dice que se retira.
Tratamos de animarle pero no se decide así que sigo con otro chico hacia Gistain.
Es la última cuesta que comparada con las que hemos hecho en insignificante. Justamente en este tramo nos adelanta Lucas. Me quedo asombrado. No solo se ha recuperado sino que va a un ritmo infernal  incluso en las subidas. Con la alegría del que se ha recuperado de un mal trago nos adelanta sonriendo.
Son los últimos kilómetros y algunos de los acompañantes y corredores que han acabado la maratón los han hecho en coche o andando para venir a animarnos.
Pasamos por San Juan  de Plan y empiezan la parte marcada con cintas que nos lleva a Plan.
En esta parte sacamos las últimas fuerzas para entrar lo más honrosamente posible a meta.
Un montón de gente aplaudiendo en la llegada. Pregunto la hora y no me lo puedo creer. He llegado a las 7:15 o sea justo en el límite de 13 horas lo que me sitúa en la última posición. ¡Bien. Voy progresando!
Me dirijo al barril de cerveza donde me dicen que queda justo para el último vaso que comparto con el siguiente corredor en entrar …
No he tenido tiempo de ver las clasificaciones pero calculo que habrán entrado una docena de corredores después del tope horario hasta que entro el corredor escoba.
Según lo que comentaban en la organización de 280 que salimos en Aínsa 140 siguieron a partir de Bielsa. La verdad es que en Bielsa la tentación de dejarlo allí y montar en el autobús que te llevaba a Plan era muy grande y esto propicio que más gente de la que tenía planeado hacer sólo la maratón lo dejará allí.
Algunos con los que coincidí en el autobús siguieron pero se volvieron a mitad de subida por algún problema físico y hubo quien llego tarde al control de Bielsa y no pudo seguir…
Después de  una reconfortante ducha y una estupenda cena vuelta a Ansia conducidos por mi amigo Quique. Allí decido seguir ruta a la playa aunque tengo que parar un par de veces por sueño. Al final llego a las 4:30 de la madrugada pero tengo todo el domingo para recuperarme.
Como resumen la carrera me ha encantado. Tanto el trazado como los paisajes son impresionantes tal vez más “limpios” que la de Canfranc donde la parte de las estaciones de esquí desmerece el resto. La organización inmejorable. Parece mentira que un club tan pequeño pueda organizar una actividad como esta tan bien cuidada en todos los detalles.
Por supuesto la carrera es dura. Comparable a la de Canfranc  aunque pienso que la de Canfranc, al ser más corta pero con más desnivel, se hace más intensa.
Las sensaciones muy buenas. La recuperación bastante mejor que hace dos semanas. Al día siguiente estaba bastante bien sin ninguna molestia.
 Estoy contento de haberme apuntado a esta carrera y a la de Canfranc pues me he podido dar cuenta de lo distinto que son los kilómetros en montaña.  Estar en una cuesta subiendo lentamente con una barrera horaria que cumplir y poderlo gestionar sin perder el control es algo con lo que me tendré que enfrentar en el Tor.
Me imagino que el Tor puede ser como hacer una ruta tan larga como la de este fin de semana pero con el desnivel de Canfranc seis días seguidos ...
P.D.  Estoy en la playa disfrutando de unos cortos dias de vacaciones pero sin mi equipo y subiendo esto desde una biblioteca municipal pero, no se porque, no puedo subir fotos ... cuando pueda relleno esto con alguna fotillo ...
16 de abril de 2012
 Hoy viene María contándome que le han dado una charla en el instituto Medina Albai-da donde estudia sobre deporte. Se la ha dado un tal Jesús. Un tío muy majo y hablador que corre en montaña y organiza carreras... De repente me doy cuenta de que conozco a ese corredor y se lo digo a María. Al enseñarle las fotos que Jesús me doy cuenta de que tengo esta entrada sin fotos así que aprovecho para "decorar" un poco esta entrada.

domingo, 12 de junio de 2011

Baño de montaña y de humildad en Canfranc

Había leído que la carrera era dura y tenían razón. De todas las que he hecho hasta ahora es, a pesar de no ser la más larga, la más dura. Pero es que aquí no cuenta tanto la distancia, 42 kilómetros,  como el desnivel, 4500 metros de ascensión acumulada lo que da, ya que empieza y acaba en el mismo sitio, un total de  9000 metros de desnivel acumulado.
Como dice Bernabé, su organizador, es una carrera por montaña no en montaña y la diferencia radica fundamentalmente en que pasas por las cimas de las montañas. Esto hace que el desnivel sea brutal. Pero bueno eso era, sobre todo, lo que había ido a buscar.

Llego el viernes a tiempo de recoger el dorsal. El propio dorsal da una idea del tipo de carrera nada "pija" en la que estoy.
El dorsal consiste en un trozo de plástico con la inevitable marca publicitaria y el
número escrito a mano con rotulador indeleble. ¡Genial esto tiene buena pinta!
En la cena coincido con Pedro otro corredor de Zaragoza que también es novato en esta carrera y con el que comparto dudas y expectativas. Luego una breve charla explicando el trazado y dando algunas recomendaciones sobre todo en la bajada de la Moleta y pronto a la cama que el sábado promete.
El sábado temprano arriba y a buscar un sitio para desayunar en Canfranc estación. Al final tengo que acudir al albergue Pepito Grillo pero merece la pena empezar una
actividad de estas características bien desayunado.

Estiramientos y la salida en la carretera. Veo una cara que me suena de los videos que he visto del Tor des Geants y alucino ... si es Salvador Calvo el corredor que quedo segundo en la primera edición del Tor y yo no me puedo creer que vaya a compartir carrera con alguien de ese nivel. 
En la salida un minuto de silencio por Armando una persona muy querida en la zona que murió el año pasado. Y luego una cosa que no había visto nunca. ! El organizador pasa lista de los participante uno a uno ¡
Vamos diciendo nuestro número de dorsal en orden para comprobar que estamos todos. En total 72 creo recordar más que en años anteriores. Una vez comprobado que estamos todos se da la salida y a trotar.
Cruzamos el pueblo luego el río por un estrecho puente donde esta Bernabé que nos despide uno a uno y al bosque por el sendero de zetas que sube junto a la tubería. Esta tubería viene del pantano de Ip y en tiempos había una carretilla a su lado por la que subían materiales y personas hasta la carretera que comunicaba con el embalse.
Es una subida para la que voy preparado, al menos mentalmente, por lo que me
mantengo en la hilera sin problemas. Salimos del bosque antes de lo que esperaba
y nos lanzamos a atacar la cima de la Moleta.
Esta empinado y enseguida empezamos a ver a los primeros bajando por el mismo camino a una velocidad envidiable comparaba con mi lento subir andando por la cuesta.
Llego a la Moleta y el control anuncia “9:55 número 10” o sea casi dos horas para los primeros1500 metros de desnivel.

En la Moleta la vista es espectacular, la verdad es que las vistas son espectaculares
durante toda la carrera. Pregunto cuanta gente falta por pasar y me dicen que unos 15. Bueno esta claro que voy en el furgón de cola. En los primeros tramos de bajada veo a un corredor bajando despacio apoyado de pies y manos. Me dice que no esta acostumbrado a esas pendientes y que es la única forma en la que baja seguro. Le ofrezco ayuda pero no la necesita y me voy pensando que eso es precisamente lo que se debe hacer.
En todo momento tienes que ser tú el que controle la actividad y no dejarte llevar por lo que los demás hacen.
Un poco más abajo se cruza un sarrio delante de mí a toda leche y con una seguridad envidiable.
Seguimos de bajada pasando por la fuente Elvira donde echamos unos buenos tragos cumpliendo con la recomendación de Bernabé.
Allí me junto con un chaval de la zona que baja al mismo ritmo que yo y empezamos a
charlar sin perder comba. El lleva una sudada superior a la mía, que ya es decir, y me cuenta que va con algo de fiebre. Esto acabará pasándole factura y no podrá completar el recorrido largo al sufrir mareos cerca de Somport. Charlando animadamente pasamos por la caseta del vasco y por un curioso túnel hasta llegar al control de Picaube.
Allí me entretengo un poco más de la cuenta y mi compañero sigue camino.
La ruta continúa por debajo del Coll de Ladrones para encarar la subida al siguiente pico La Raca.
Para esta subida ya no estaba preparado y se me hace eterna. Después de los 1500 metros de la subida a la Moleta estos mil y pico se hacen muy duros. Tengo que ir parando a ratos para recuperar resuello hasta que llego a la cumbre. Me dan un vaso de agua y me toman el dorsal. Y otra vez a bajar. Esta vez voy solo.
La bajada es por las pistas de esquí que ahora son un canchal bastante cómodo de correr aunque no muy bonito...Llego a la carretera y al control de Somport.
Se que en este control si no llegas antes de las 3 tienes que seguir por la ruta corta. Yo no llevo reloj salvo en el móvil pero no lo he consultado en toda la carrera pues por mucha presión que me meta no puedo ir más deprisa de lo que voy.
Pero en el control no ponen ningún problema para que siga con la larga. 

Por un sendero precioso llego a Candanchu y allí empieza otra cuesta interminable. Arriba veo a otro corredor al que poco a poco doy alcance ya en el collado. Es un chaval de valencia que tiene problemas con el estomago y no ha conseguido comer nada en toda la carrera.
Esto es una puñeta pues en una actividad tan exigente como esta es importante comer algo aunque sea en pequeñas dosis a la vez que tienes que hidratarte constantemente. Salvo ese problema esta bien así que me lanzo en la bajada hasta la olla de Estiviellas. 

Otro sitio precioso por el que pasamos y ya he perdido la cuenta.
La pradera esta cruzada por un riachuelo que a estas alturas me cuesta saltar y toda la hierba esta empapada de agua por lo que acabo con los dos pies empapados. A pesar de esto no noto ninguna molestia.
Hasta ahora solo he sufrido un par de torceduras sin importancia y un tirón en el muslo de la pierna derecha que he conseguido manejar sin mucho  inconveniente.
Si no fuera por lo que me cuesta subir... diría que estoy hecho un chaval...
Queda la subida al Coll de Estiviellas. Subida no muy larga pero sin sendero. No tengo fuerzas para subir de frente así que me tengo que inventar las zetas.
Enseguida me adelanta otro corredor. A estas alturas ya me da lo mismo pues ni
siquiera puedo usar esa competitividad para sacar más fuerzas de mis piernas.
Lo cierto es que subo lento. El valenciano, que resulta llamarse Javier, se acerca y
acabamos llegando  juntos al pie del collado. Él se para a descansar pero yo no puedo
pararme pues sé que si lo hago me quedare helado, empezare a temblar y a perder el control así que llego solo al control del collado.
Un poco de agua y unas almendras cortesía de los amables voluntarios me ayudan a reponerme. Les pido que me hagan unas fotos y me confirma que somos los
últimos.
A partir de aquí sé que queda una larga bajada y me lanzo por la senda.
Al poco se ve Canfranc abajo pero es sólo un espejismo pues el camino desciende muy
lentamente y la bajada se hace interminable.
Es un tramo muy trotable pero a estas alturas ya no puedo trotar mucho rato seguido ni de bajada y voy alternando trote y andar rápido. Al final en una revuelta me topo con la carretera y el pueblo.
Aun tengo que bajar todo el tramo del pueblo y llegar al polideportivo entre los aplausos y ánimos de los vecinos y corredores.
Unas niñas con la sinceridad de su edad y con un criterio que espero cambien me dicen "! pues a buenas horas llegas tú !".
Llego contento y cansado. Saludo a Monrasin que me indica que he llegado a las 18:24 o sea fuera de tiempo oficial (aunque eso no parece importar lo más mínimo ni a mí ni a nadie).
Estamos hablando un rato de carreras y blogs cuando llega el último así que grabo el video de su llegada.

Esta tan contento como yo y en pocos minutos empezará a comer con normalidad.

Antes de la cena aprovecho para hablar con Bernabé que me cuenta que la carrera ha ido muy bien sin ningún incidente y me habla del origen de esta carrera.
Resulta que para prepararse para sus competiciones venia todos los años a esta zona y realizaba una ruta que es la que hemos hecho nosotros.
Yo me quedo pensando lo duro que tiene que ser hacer esta ruta sin avituallamiento y solo pero si de algo me he dado cuenta en Canfranc es que hay gente muy fuerte y muy preparada para este tipo de carreras.

Me encuentro con Salvador en el pabellón y aprovecho para pedirle que compare la ruta que acabamos de hacer (él en la mitad de tiempo que yo) con alguna de las etapas del Tor. Me tranquiliza cuando me dice que es comparable si no con la más dura si con varias de ellas pero que lo difícil del Tor es que son varios días seguidos. También me comenta lo difícil que es contar con 6 días seguidos de buen tiempo en esas montañas la que hace aconsejable ir con algo de tiempo de sobra.
La cena con la entrega de premios es divertida y familiar… con los organizadores
subidos al podium ... y todo el mundo hablando de lo bien que lo ha pasado y de futuros proyectos.
La gente con la que ceno continúan con la carrera del Tozal de Guara para aprovechar el viaje desde Valencia.
Quedamos en compartir fotos , visitar nuestros blogs y nos despedimos hasta la próxima.
En resumen necesito mejorar bastante en las subidas pues se nota que es algo que no he entrenado casi nada. El material a llevar lo tengo bastante pillado.
Yo soy más burro de carga que gacela y eso hace que llevar algo de peso extra aunque luego no lo use no sea un gran inconveniente pues mentalmente me hace sentirme
más seguro.
Buenas sensaciones pues he podido acabar la carrera a pesar de lo que me costaba superar las cuestas.
La siguiente prueba de estas características será la UTS.
A ver como se me da.
Clasificaciones 

jueves, 9 de junio de 2011

Sombras, mentiras y proyectos

Es una foto que me saco un amigo hace poco.
Creo que me gusta porque muestra esa gran verdad relacionada con la imagen que de nosotros mismos queremos dar a los demás y, a veces, incluso a nosotros mismos.
Esa especie de juego de sombras chinescas que te permite reinventarte de nuevo otra vez... ese juego que tanto me gusta y que ya no se si es una forma de evitar madurar... o simplemente la única forma de vivir que puedo soportar... o de sentirme vivo a base de desprendimientos de rutina... no se
Es algo a lo que se presta esto de escribir un blog... que no deja de ser una sombra amañada para dar una buena imagen del autor...
Lo bueno de esto es que acabas por querer ser tal y como te ves reflejado en la pared  y todo este juego termina siendo una forma sutil de intentar ser mejor… por el camino de ser simplemente más feliz.

Pasado Ronda me toco centrarme en los exámenes de inglés hasta finales de Mayo. Una vez pasados y sin resultados todavía vuelvo a trotar... primero los paseos de 10 Kms en la ribera del Ebro que es el circuito que sigue sin aburrirme y que considero el paseo básico.
Tras las primeras sensaciones extrañas de las vueltas a empezar vienen las buenas sensaciones … otra vez me siento ligero y tranquilo corriendo … a la vez que proyecto salidas largas por los alrededores o por las zonas del Pirineo o Prepirineo que conozco
Este fin de semana tocaba una salida larga.
La idea inicial era continuar la última salida con Chema antes de Ronda para intentar llegar a Alagón y volver en el autobús pero he leído el post de Monrasin y me he apuntado a la Canfranc - Canfranc de este año.
Se dice que es una carrera dura con pocos participantes. Veo que el año pasado no llegaron a 40 y eso me gusta.
Conozco un poco la zona. En la Moleta estuve con mi padre hace unos años.
Precisamente en la cima se me despego la suela de una bota (unas Boreal Mali para más detalles). Mi padre, que siempre llevaba una cuerda en forma de onda, me la apaño y pude llegar a Canfranc calzado. Recuerdo que bajando por el camino de las zetas junto al tubo pensé que sería duro tener que subir por ese mismo sendero andando.
Ese camino es justo la primera parte de la carrera del sábado.
Por otro lado desde la cima de la Moleta vimos unos caminos por las crestas cercanas que tenían buena pinta y recuerdo que nos quedamos con las ganas de explorarlos algún día… el sábado, con suerte, será ese día.
No tengo mucha información de la carrera así que iré en la furgoneta con todo el material y me dejaré aconsejar en la cena de la pasta.
Intentaré ir lo más ligero que pueda porque soy consciente de que la prueba es más dura de lo que sería aconsejable para la progresión que llevo.
Como progresión para estos meses la intención que llevo es ir aumentando la carga de kilómetros semanales hasta llegar a alguna semana de 150 Km. con desnivel e ir teniendo alguna experiencia de noche en montaña intentando dormir algo en el saco ligero que pienso llevar encima en Aosta para ver que tal se descansa.
La idea es ir preparándome ya sin parones para el Tor aprovechando carreras cercanas o montando alguna salida por Ordesa o la zona de Villanua...no se… se admiten sugerencias.
La Isostar y la Ehunmilak las dejo aparcadas. Mas la primera que la segunda pues ahora que coinciden en fechas me apetece mucho más la de montaña y creo que es más apropiada para el objetivo Tor.
Cuanto más se acerca el día de partir para Aosta más me apetece. La idea sigue siendo ir lo mejor preparado posible sin estresarme y disfrutar lo máximo. Me conformo con llegar a la vez que el colega del video e igual de contento.